Opinión

Candidatos vendiendo sueños

Por Pablo Najarro Carnero

Teólogo y docente

Candidatos vendiendo sueñosImagen: Noticias SER

En estos casi 40 días para el 11 de abril, entramos en una endemia nacional. Todo el lenguaje entra en tono – o modo – publicidad electoral. ¿Por quién votar? ¿Nos equivocaremos de nuevo? ¿O ya tenemos nuestro candidato o partido a quien le seremos fieles a pesar de lo que le digan? … esto último me suena a fútbol. Hincha, ¡así vaya a segunda!, ¡Soy de la “U”!

Entonces tendremos muchas voces – como el virus – que antes no habíamos escuchado, proclamando su corazón social identificado con el pueblo. La derecha odebrechiana confiepista se vuelve populista. Y claro, ya escogieron su caballo de Troya para ganarse nuestro voto. Y también, ya escogieron a que votante buscarán. Claro, tienen que hacerse la voz de un reclamo justo o injusto. La cosa es ganar votos.

Alguien dirá que se volteará a la SUNEDU por cerrar la universidad de su tierra y que se reabrirán las susodichas. Otro dirá que tiene la solución a el COVID19. Ahí, al hilo, a Sagasti o por ser del partido de Guzmán o por tener a Mazzeti. Si es hábil su chiquita a Vizcarra. Un voto fuerte será mostrar xenofobia solapada – y claro, hay razones – para botar a los venezolanos, dígase extranjeros que delinquen – ¡zas!. Luchar contra la corrupción, esta no falla. Habrá que ver quién lo dice. No faltarán los que digan – son conocidos – que quien nos salvó del terrorismo fue Fujimori. La verdad fue el GEIN a espaldas de Fujimori y Montesinos.

Unido a lo último, pensando en quienes tienen más de treinta años o mejor si es menos, sacar al cuco del terrorismo. La prensa fiel que mamó de esa época, sacará imágenes de terror de Sendero Luminoso. Ponerle el sambenito de “terruco”, así sea mentira, funcionará. Otra frasecita que ha pegado ha sido llamarle “caviar” a alguien. No saben que significa, pero suena feo. Se le llama así al que tiene posición económica estable, pero que no se puede entender que piense en los pobres. Claro, si es un pobre defendiendo a los ricos, eso sí está bien. Palmaditas al buen hombre o mujer.

Las que no fallan. Sabiendo que en el Perú hay harto cristiano – católico, evangélico, adventista, testigo, mormón, etc. – decir que son pro abortistas y que va contra la ley divina, voto fijo. En este grupo también asegura el voto decir que son “socialistas”, “comunistas”. La última palabra te excomulga de la Iglesia Católica sobre el pucho. De las otras, no sé. Yo todavía sigo. ¿Se habrá dado cuenta mi obispo opusdeísta o cura sodálite? ¡Uy! Ésta es mejor. “Están a favor de los homosexuales”. Lo raro es que los condenan pero los emplean en los canales para la campaña.

Otra que tampoco falla. “Con ése candidato vamos a ser como Venezuela”, también se usa a Cuba. ¡Ahhh! No me olvidé, el cambio de Constitución. ¿Por qué? No sé, pero pega. Pregúntale si es toda o en parte y qué parte. No sabe, no responde.

Ahora decir que los del Tribunal Constitucional le perdonaron la vida a Telefónica, en un país donde no le perdonan a la bodeguita por S/ 10.00, gana votos. Aunque bueno hace tiempo debieron irse, pero cinco son fieles al fujiaprismo, Confiep y Odebrecht. No podían irse. Contra dos honestos, mayoría corrupta ganó. Exonerados de pagar.

Hay voces diciendo que hay que evitar a “esos socialistas”. ¡Horror si llegan! Verónika, Guzmán o quizá Lescano. Varios canales y prensa, billete e intereses de por medio van sacando encuestas falsas diciendo que fulanito de tal va primero.

Pienso en los tres mencionados. Esperaré a ver cuál me suena mejor.