Eland Vera: "La Constitución debe ser una plataforma en la que nadie se sienta excluido ni olvidado"
Frente a la irresuelta crisis política que vive el país, Eland Vera, Catedrático de la Universidad Nacional del Altiplano y Magister en sociología puneño, conversa con Noticias SER sobre la necesidad y la importancia de un nuevo pacto social que permita la estabilidad de nuestro país y un crecimiento sin exclusión.
La crisis por la que está pasando nuestro país ha mostrado que Puno y varias regiones del sur tienen una lectura política distinta del resto del país. ¿A qué cree que se debe esto?
Actualmente estamos viviendo una crisis política que ha sacado a la palestra una crisis más profunda, construida a través de muchos años donde hay un ciudadano olvidado por el Estado, y hoy se hace más evidente esa brecha. La realidad es que ese ciudadano de a pie encontraron en la figura de Pedro Castillo una esperanza, un símbolo para cambiar esa realidad en la cual ellos se desarrollan y que no es justa ni prospera desde su perspectiva.
Otro tema que ha vuelto a ser colocado por los pueblos del “Sur” es la necesidad de una nueva constitución política que sustituya a la constitución de Fujimori. ¿Por qué se plantea esta demanda?
Es una realidad el petitorio de un cambio de constitución en las regiones del sur. Tú sales a preguntar acá en Puno y es mucho más fácil encontrar a una persona que esté de acuerdo con el cambio de una constitución qué en Lima, porque, demográficamente hablando la persona se desarrolla en un contexto diferente contexto y tiene una visión diferente del país. Por ello es muy importante la participación de nuevos actores políticos, que concienticen y permitan que la gente conozca la importancia de un cambio de constitución, para que la gente conozca el funcionamiento del actual y cómo es que está constitución posiciona en el centro de todo a la inversión transnacional, algo que ha generado un avance significativo pero que no ha cerrado las brechas sociales y económicas que afectan a la población olvidada del país. Los peruanos debemos de tomar conciencia de la importancia de nuestro papel político, tomar conciencia de nuestra realidad y de las problemáticas del país para poder generar un nuevo pacto social que permita el crecimiento de todos los peruanos. Es necesario que ese nuevo pacto articule las diferentes fuerzas sociales de nuestro país sin olvidar a nadie. La constitución debe ser una plataforma en la que nadie se sienta excluido ni olvidado. Sin embargo, con la polarización qué existe hoy en día conseguir esto es difícil, pero es un trabajo que vamos a tener que sacar adelante y que si no cambiamos, nada cambiará en realidad.
¿Cuán importante es la participación y representación de las diferentes fuerzas políticas del país en la elaboración de una nueva constitución?
Es sumamente importante, debido a mis años yo recuerdo la elaboración de la Constitución del 79. Una constitución que fue hecha por las tres grandes fuerzas del siglo XX: el socialismo, el social cristianismo, y el aprismo, cada uno tuvo un tercio y eso produjo ese pacto. Ahora bien, no es posible volver a esa Constitución porque ya está desfasada y es obvio que no podemos hablar de una actualización de la misma, pero aquel proceso es un ejemplo de que el Perú puede existir este pacto social que permitiría la representación de los peruanos y su no disconformidad con la misma.
Se dice que “el puneño es un ciudadano políticamente rebelde debido al contexto en que se ha desarrollado” ¿Qué opinión le merece esta frase?
Yo creo que eso saca la palestra por ejemplo lo que decía José Luis Renique, uno de nuestros mejores historiadores contemporáneos, que refería que el “Sur” se constituye como la nación radical, que no es otra cosa que un conjunto de aspiraciones, objetivos prácticas, movimientos que buscan un cambio del orden establecido. Ese cambio del orden establecido es un proyecto y anhelo qué busca la reivindicación de las poblaciones olvidadas en nuestro país, en especial de la población originaria y que apunta a que tomen un protagonismo en el manejo y participación política del país. Y además, que permita que el diseño del estado este al servicio de aquellas personas que lo necesitan, como en cualquier país del mundo, y como eso no ocurre en nuestro país, ahí está el origen de la rebeldía. Yo creo que a nivel local los puneños somos un ejemplo de ello, somos de los ciudadanos a nivel nacional qué tenemos más conciencia política, qué entendemos la importancia de hacer conocer nuestra voz, de levantar nuestra opinión y de decir que para nosotros es necesario un nuevo pacto social que rediseñe la institucionalidad del país y que permita que el estado esté al servicio de quién tiene que estar, para lograr así un Perú mejor, uno en el que nadie se sienta ni excluido, ni olvidado.