Gerente Regional de Salud de Cusco indica que hay retraso en la entrega de vacunas
Corresponsal en Cusco
El Gerente Regional de Salud de Cusco, Juan Alberto Spelucin ha indicado que hay un retraso en la entrega de vacunas por parte del gobierno nacional y espera que se supere pronto el impase.
El funcionario refirió que este retraso afecta la vacunación en Cusco porque ya se había hecho el "anuncio para los de 30 años porque así estaba en el cronograma y este ha sido alterado”, indicó el Dr. Juan Alberto Spelucin.
En ese sentido, el Viceministro de Salud se habría comunicado con la gerencia de salud de Cusco indicando que las vacunas estarían llegando entre el 14 y 15 de agosto, pero el gerente refirió que no hay una información real sobre el retraso de las vacunas.
Juan Alberto Spelucin, sostuvo que se espera vacunar contra este virus al 80% de la población de la región antes de que culmine el presente año. “Si seguimos a este ritmo en 10 semanas acabaríamos la inoculación, pero eso no depende del personal, sino del ingreso de las vacunas. Esperemos que este pequeño bache se solucione esta semana y que podamos tener el volumen de dosis que nos permita llegar a nuestra meta”, enfatizó.
Más de 10 mil cusqueños ya fueron vacunados
El gerente de salud también indicó que después de las diversas campañas contra el covid-19 en diferentes provincias de Cusco ya se superó la cantidad de 100 mil personas inmunizadas entre las edades de 40, 50 y más años, y que a la vez se aplicaron más de 520 mil dosis de vacunas y solo faltarían dos tercios para lograr la inmunización de la población cusqueña.
“Si llegamos por lo menos al 75 u 80 por ciento podríamos alcanzar la inmunidad de rebaño y comenzar a respirar un poco más tranquilos para pasar un fin de año diferente, después de casi dos años de pandemia que nos llevó a condiciones críticas de salud”, refirió.
Cabe indicar, que el Plan Regional de Vacunación, elaborado por la GERESA, establece tres etapas para aplicar las vacunas enviadas desde el Ejecutivo nacional. La primera fase permitió proteger la integridad del sistema de salud y la continuidad de los servicios básicos (personal sector público y privado). Una segunda etapa, tiene la finalidad de reducir la morbilidad severa y la mortalidad en la población de mayor riesgo.