La pandemia del covid-19 y la incapacidad para enfrentarla marcaron el 2020 en Ayacucho

A pocos días de finalizar el año 2020, Noticias SER recogió algunas opiniones de autoridades y representantes de organizaciones sociales, sobre los acontecimientos que marcaron este año en nuestra región.

Oscar Oré Curo, Consejero Regional por la Provincia de Huanta, precisó que durante este año la región ha sido golpeada por la pandemia, donde hubo indicios de corrupción por parte de algunas autoridades y decisiones a destiempo por parte del gobernador regional. “Este año para mí ha sido más malo y feo porque nuestra región lamentablemente viene pasando por momentos difíciles, hemos visto funcionarios inmersos en denuncias por compras sobrevaloradas, decisiones desatinadas y a destiempo, como la instalación o construcción de los espacios covid-19: Lo otro que se debe puntualizar como negativo es el bajo nivel en la ejecución presupuestal, habiendo tanta necesidad”, dijo.

Elizabeth Prado, consejera Regional por Huamanga, manifestó que durante este tiempo ha visto una deficiente atención en los hospitales, asimismo señaló que desde el gobierno regional no se han ejecutado obras para generar trabajo, en medio de esta pandemia, porque además no hay un plan para que se pueda fortalecer las actividades económicas. “Hemos visto mucha improvisación de los funcionarios, ha sido tardía la remodelación de los hospitales, así como la instalación de las plantas de oxígeno y el hospital de contingencia, esa lentitud es síntoma de que no hay capacidad de reacción inmediata ante situaciones como las que hemos vivido”, expresó.

Por su parte, Evelyn Loayza, presidenta del Instituto Regional de la Juventud Ayacuchana (IRJA), indicó que no existen políticas a favor de los jóvenes, que se han visto afectados en esta pandemia. De otro lado precisó que el covid-19 desestabilizó a la ciudadanía y la población joven ha sentido la falta de políticas públicas. “En Ayacucho tenemos la agenda joven, la cual no ha sido implementada por nuestras autoridades, por ello estamos saliendo a las municipalidades a fin de que puedan implementar la agenda y responder a este sinfín de problemas agudizados en esta población afectada sin acceso a educación, sin acceso a trabajo y con un futuro incierto”, refirió. Por otro lado resaltó que en medio de la pandemia lo bueno fue que "los hermanos productores pudieron comercializar sus productos de manera directa, a través de los mercados y ferias itinerantes".

Olga Calderón presidenta de la Federación Regional de Mujeres Indígenas de Ayacucho, (FEREMIA), señaló que las autoridades han tomado como pretexto la pandemia para no hacer obras y enriquecerse con dinero del pueblo y se ha visto un mala atención en los centros de salud. “La pandemia para nuestras autoridades ha sido para enriquecerse y no han priorizado proyectos de impacto, han tomado la pandemia como excusa para no hacer obras. En salud se ha visto una pésima atención, puesto que tenemos un sistema de salud precario y profesionales que no han sabido tratar la enfermedad del covid. En el tema educativo las clases virtuales no han llegado a cubrir a muchos niños, sobre todo de las zonas rurales. No podemos rescatar nada positivo, porque a raíz de la pandemia se han vulnerado nuestros derechos, en lo económico, en salud y educación”, dijo.

Edilberto Barzola, Presidente del Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho (FREDEPA), manifestó que durante este año no encuentra acontecimientos positivos que hayan marcado el rumbo de nuestra región. “Con esta pandemia hemos descubierto con toda claridad como estábamos en salud, educación y en los diferentes sectores. No puedo rescatar nada porque sentimos que estamos abandonados por nuestras autoridades, que no han podido hacerle frente a la pandemia”, sostuvo.

Alejandro Manay Pillaca, Secretario del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú, base Huamanga, señaló que desde su espacio hubo un gran malestar por parte de los docentes, padres de familia y estudiantes. “Hubo un malestar desde los docentes que han tenido una sobrecarga laboral, y presión para que hagan un trabajo remoto sin tener las herramientas para ello, el tema del hostigamiento laboral con monitoreo y un serie de documentos de informe que no están contemplados, sin embargo se venían exigiendo. Por otro lado la desilusión de los padres de familia y estudiantes que se les prometió las tablets, casi al inicio de la educación remota y prácticamente no se ha cumplido”, expresó.