Vacunación: sin horizonte a la vista

La segunda ola ha comenzado a golpear con fuerza nuestro país. El número de contagios y de muertos por el covid-19 aumenta. Y comienzan a repetirse las mismas escenas del primer semestre del 2020: carencia de camas UCI, falta de oxígeno, incapacidad del sistema para responder a este nuevo momento de la pandemia. Pero también constatamos el incumplimiento o relajo de las normas sanitarias de parte de la ciudadanía.

Estas situaciones que nos golpean a todos los peruanos y peruanas nos hacen pensar que es poco lo que aprendimos de la dramática experiencia del año pasado, pero además pone sobre el tapete – de nuevo- cuál es la razón de fondo de nuestra poca capacidad para responder como Estado y como Sociedad a la crisis. La respuesta más fácil es la de siempre: de un lado la negligencia de la burocracia, de otro la falta de respeto a la ley de parte de la ciudadanía. Explicaciones simplistas que solo abordan una dimensión del problema y que al final nada resuelven.

En más de una ocasión hemos señalado que la respuesta a la crisis sanitaria requiere de un esfuerzo conjunto, de la suma de voluntades públicas y privadas, de autoridades, funcionarios y ciudadanía; e incluso, ante el anuncio de las compras de vacuna de Sinopharm y AstraZeneca señalamos que era una oportunidad para generar una respuesta organizada a la pandemia. Y lo seguimos creyendo. Proceso que debe aprender de problemas en la implementación de las campañas de vacunación en otras partes del mundo.

Lamentablemente seguimos constatando la falta de claridad sobre cómo y cuándo se iniciará, al mismo tiempo que anuncios diversos de los gobiernos regionales sobre las cantidades solicitadas y los grupos prioritarios que deben recibirla. Y es que en la limitada y confusa información dada por el gobierno sobre el tema, las presiones, demandas y especulaciones crecen, favoreciendo a los antivacunas, que alimentan los medios y las redes con mentiras sobre los impactos negativos que las vacunas nos causarían que han llevado a que –de acuerdo a la última encuesta de Ipsos – cerca de la mitad de la población no esté dispuesta a vacunarse.

En Noticias SER consideramos que es imprescindible que a la par que se toman medidas para enfrentar la segunda ola de la pandemia, es fundamental dar mensajes claros y contundentes sobre la implementación de la campaña de vacunación, tanto en lo referente a lo logístico y organizativo, como a los mensajes destinados a vencer la resistencia creciente de la ciudadanía a ser vacunada. No vaya a ser que cuando por fin tengamos las vacunas, no lleguen a quienes quieran recibirla, o peor aún que haya muchos que no quieran ser vacunados.