Villa El Salvador: 50 años aportando al Perú

Hace 50 años, el 11 de mayo de 1971, cientos de pobladores que habían invadido terrenos adyacentes a la Panamericana Sur, a la altura de lo que hoy es la Universidad Ricardo Palma y las urbanizaciones que rodean el Colegio de la Inmaculada, y días después del enfrentamiento con la policía que dejó un fallecido, Edilberto Ramos Javier, de la detención de Monseñor Luis Bambarén, Obispo de los Pueblos Jóvenes, y de la intervención directa del entonces Presidente Juan Velasco, fueron trasladados a los arenales de Tablada de Lurín, varios kilómetros más al sur de la Capital, dando origen a Villa El Salvador.

Han pasado 50 años en los cuales el pueblo y la comunidad de Villa El Salvador siempre ha estado presente en la historia del Perú. Aquí hemos vivido lo bueno, lo malo y lo feo de estas cinco décadas nacionales, y siempre con voz propia, transformándose en una comunidad, en un distrito que lo diferencia claramente de otros no solo por su planificación territorial exitosa, sino fundamentalmente por la participación de sus vecinos, su creatividad y su compromiso, aportando siempre ideas y prácticas que han sido asumidas por todo el Perú.

En primer lugar, la CUAVES, la Comunidad Urbana Autogestionaria, como organización de todos los pobladores de Villa El Salvador, generando no solo el Primer Plan Integral de Desarrollo, en un desierto y desde la nada, sino fundamentalmente construyendo una identidad propia como vecinos, como salvadoreños, siendo este un primer aporte a un Perú que cambiaba y que cuestionaba la poca o nula participación de los sectores populares andinos, amazónicos, rurales, en la política, en la sociedad y en el Estado.

La CUAVES fue la primera organización en el Perú en dar el voto a los 18 años (recién la Constitución del 79 lo incorporó), promovió el Plan único de Salud con promotoras comunales, los PRONOEIS con las animadoras comunales atendiendo a niños de a 5 años, las lagunas de oxidación para no botar ni una sola gota de desagüe al mar. Y las vecinas crearon la primera Federación de Mujeres de todo el Perú, la FEPOMUVES, y los talleristas, la primera APEMIPE, aquí llamada APEMIVES, experiencias que se fueron extendiendo por todo el Perú.

Una vez creado el distrito en 1983, y con la primera gestión municipal, la CUAVES y la Municipalidad crean en Villa El Salvador el presupuesto participativo que fue acogido, primero por el Perú, luego por Brasil y después por toda América Latina y Europa, las Comisiones Mixtas compuestas por regidores y dirigentes comunales, las primeras direcciones municipales de desarrollo económico local, de juventudes, y de seguridad ciudadana, cuando recién San Isidro y Miraflores creaban el serenazgo municipal, y la concertación público privada que hizo posible el Parque Industrial en lo que era un arenal vacío. Todos ellos son aportes de Villa El Salvador al Perú.

No puedo dejar de mencionar el lema central de Villa El Salvador en los años 80 y 90: “Paz con Justicia Social”, defendiendo la vida, enfrentando el terror y la violencia, cuando todo Lima se desentendía ante la gravísima situación que vivían amplias zonas de la sierra y de la selva a causa del terrorismo, Villa El Salvador dió la cara cuando todos se callaban… y ahí están nuestros mártires María Elena Moyano, heroína nacional, Rosendo Galindo, teniente alcalde, el Mayor Comisario Pércovich, el matrimonio Pantigoso, todos ellos asesinados por Sendero Luminoso, junto con dirigentes heridos y calumniados, enfrentándose al terror y siendo, a veces, mal entendidos por el Gobierno Nacional.

Definitivamente, Villa El Salvador no es una comunidad neutral, no es cualquier distrito. Por eso, al celebrar las Bodas de Oro, en medio de esta pandemia terrible, nos unimos a todos los pueblos del Perú en el año del Bicentenario, aportando siempre ideas y prácticas democráticas, participativas, como la mejor solución a los problemas del Perú.

*Michel Azcueta, primer alcalde de Villa el Salvador